Cadaqués—mar, montaña y glamping

Casas pintadas de blanco con los marcos de las puertas y ventanas azules. Calles que suben y bajan, se tuercen, no van a ningún lado, salen al mar. Cuadritos pintados en las tapas de luz de las veredas con botes pesqueros. Un paseo marítimo en zigzag que hace que la mirada vaya hacia adentro, hacia afuera, hacia adentro, hacia afuera, al pueblo, al mar, al pueblo, al mar. Cadaqués cala profundo.

En esta nota, comparto info sobre dónde quedarse, dónde comer y qué hacer en el pueblo más maravilloso de la Costa Brava.

Dónde está

Cadaqués es un pueblo de Girona que forma parte de la comarca del Alt Empordà. Está a 170 kilómetros de Barcelona, es uno de los pueblos más remotos de la Costa Brava casi en la frontera con Francia y la forma más sencilla de llegar es en coche. Como está ubicado en la montaña al borde del mar, el tramo final es bastante sinuoso, y la vista al llegar es alucinante.

Es muy visitado porque inspiró la obra de Salvador Dalí, que vivió en la casa de Port Lligat durante 52 años con su pareja Gala y ahora está abierta como museo.

Además, está a 3 kilómetros de la entrada del Parque Natural del Cap de Creus, que es el punto más oriental de la península ibérica, y llegar a su faro a pie es una parte clave del Camino de Ronda.

Dónde quedarse

Siempre recomiendo los campings de wecamp porque son eco-friendly, están ubicados en un entorno natural, son accesibles, cómodos para grupos y aceptan perros.

Esta vez nos quedamos en una tienda de glamping porque era la que había disponible. La tienda es espectacular, amplia (para 6 personas), tiene deck para hacer las comidas al aire libre, baño, cocina con hornalla, heladera y hasta microondas. Para quienes disfrutan de estar más afuera que adentro, es ideal.

Lo único negativo que encontramos con respecto a esta tienda es que en Cadaqués hay mucho viento y fue difícil dormir a la noche por el ruido. Yo estoy acostumbrada a usar audífonos para el ruido y antifaz para la luz, pero no fue el caso de mis compañerxs de viaje. Así que, si te vas a quedar en esta tienda, audífonos y antifaz son dos básicos para una estadía más cómoda.

Dónde comer

Esta es una de las partes más importantes de mis viajes. ¡Y qué bien se come en Cadaqués! Te dejo mis recomendaciones, cortito y al pie:

  • Casa Pilar - una casa hecha restaurante, con pocas mesas y buen servicio. Menú de mediodía a €30. A probar: las anchoas. Son un básico de la cocina cadaquesenca. (Estaban increíbles y a mi ni me gustaban)

  • Es Racó d'en Dani - chiringuito a 50 metros de la casa de Dalí. Comida de mar increíble y a buen precio. A probar: la ensalada con queso de cabra y miel.

  • Cadaqués Cuina - rotisería con comida para llevar muy muy rica y a buen precio. Son argentinxs así que hay empanadas. A probar: un poco de todo. ¡Amamos este hallazgo!

  • El Trastocat - es el restaurante de wecamp. Tienen algunas entradas y hacen solo pizzas, que está muy bien. De postre, helado, fuerte al medio. La vista de día es espectacular.

  • Restaurant Cap de Creus - en la cima del Parque Natural Cap de Creus al lado del faro, el camino es alucinante y la comida nos encantó. Ojo, hay que hacer reserva - no se puede entrar al parque con vehículo sin autorización.+

Dato: todos estos restaurantes aceptan perrunos. ¡Tupac no se perdió una!

Vinitos

La región del Empordà tiene varios vinos de producción local. Nosotrxs probamos un tinto y un blanco.

  • Perafita Tinto de bodega Martín Faixó - está bueno pero es un poco más robusto de lo que tomo últimamente. Me gustan más ligeritos.

  • Clos Primat blanco de bodega Oliveda - ni muy dulce ni muy seco. Me gustó mucho para aperitivo.

Qué hacer

Paseo marítimo

Caminar por el paseo marítimo e ir bajando en cada cala que te guste es un planazo. Como son playas de piedra, dejo algunas recomendaciones:

  • la sombrilla está de más, nunca la usamos

  • llevar manta o toalla para sentarse y que no lastimen las piedras

  • usar ojotas o zapatillas de agua para nadar en el mar sin dolor de pies

Lo más lindo fue ir descubriendo las calas, cada una tiene lo suyo. Y hay oportunidades frecuentes para refrescarse, las playitas están a dos o tres cuadras de distancia entre sí.

Caminar por el pueblo

Es de los pueblos más pintorescos que visité. Las casas pintadas de blanco, las calles que suben y bajan. Y lo más hermoso fue descubrir que las tapas de luz de las veredas tienen cuadritos pintados a mano. Realmente muy hermoso. Me queda pendiente volver y recorrer las calles más alejadas de la avenida principal. Cadaqués necesita tiempo.

Casa-Museo Dalí

La casa es imponente. Queda en Portlligat y se puede llegar a pie y en coche. Atenti, hay que reservar para entrar a la casa y/o a los jardines. Nosotrxs colgamos con la reserva y no pudimos visitarla pero igual vale la pena ir a ver la fachada y la vista desde la casa hacia el mar. Además tiene su playa y es otra oportunidad para nadar un rato.

Cap de Creus

Se puede llegar al faro del Parque Natural Cap de Creus a pie y es uno de los tramos más impactantes del Camino de Ronda a esa altura. El paisaje es de otro planeta. Nosotrxs fuimos en coche porque íbamos a almorzar pero vimos mucha gente haciendo el camino a pie. Se puede dejar el coche en la puerta justo antes de la entrada al parque. Además, hay playas adentro que se veían increíbles. ¡Tendremos que volver!

Si no conocés Cadaqués, creo que es un lugar para agregar a la lista de deseos. Yo me enamoré -no me cuesta mucho enamorarme de pueblos entre mar y montaña- y me alegra haber dejado pendientes para volver.

Si tenés alguna pregunta o sugerencia, ando por acá.

Nos vemos en el camino,

Flor

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Flor Tracchia

el otro mapa es un blog en el que comparto mis experiencias viajeras y converso con otras personas sobre destinos singulares, maneras de recorrer el mundo y otros temas que me dan curiosidad en relación a los viajes

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